Esto no es un blog de cine :)

Pero como ingeniero a uno se le queda en la memoria aquella escena de la película: Apollo XIII, en la que todo un equipo de doctores, científicos e ingenieros de la NASA se plantan delante de una mesa para resolver un problemilla: Encajar una pieza cuadrada en un agujero redondo.

Hacerlo era clave para la supervivencia de los astronautas y debían resolverlo utilizando únicamente las piezas disponibles a bordo de la nave, lo cual finalmente lograron a base de ingenio y grandes dosis de cinta americana, creando un nuevo dispositivo al que llamaron cariñosamente "El buzón".

Corría el año 1970 y hoy, 33 años después, parece que al fin la NASA ha dado con la fórmula para evitar que éste tipo de problemas, y otros muchos, pongan en peligro la vida de la tripulación. ¿Cómo?: llevando la primera impresora 3-D al espacio, a bordo de la Estación Espacial Internacional.

La impresora, desarrollada por madeinspace.us ya ha sido probada para trabajar en gravedad cero, y servirá no solo para reparar o sustituir piezas dañadas, sino para fabricar aquellas que sean necesárias para los experimentos científicos y en el día a día.

Aquí os dejamos con el vídeo de la noticia completa: